"Cuando llegamos a Santiago, a la Estación Central, nos encontramos con que el nocturno que tiene que salir hacia el sur aún estaba en la estación con toda la gente adentro. Ellos nos decían: “¡Hay golpe de Estado! ¡No se bajen, quédense arriba del tren porque los van a matar! ¡Están bombardeando la Universidad Técnica!”. Describían una situación "(Extracto que acompaña a la ilustración en el libro).
"Lo que más me impresionó es ver desde la Alameda por Ahumada que se veía hasta Mapocho, donde no se veía un alma. Al lado de Andrés Bello había un grupo de milicos con su metralleta, cuyas balas brillaban en el sol de septiembre. Nos cruzamos la mirada, estaban tan nerviosos como yo, que iba caminando en pleno toque de queda total. Ahí en la torres San Borja me encontré con un enfrentamiento entre francotiradores y los milicos, que estaban tratando de tomarse la torre. Yo después seguí mi camino y lo que más me impresionaba era ver una ciudad totalmente vacía, muerta, solo con los milicos en la calle." (Extracto que acompaña a la ilustración en el libro).
"Y bueno, quedó la escoba, por que rápidamente apareció alguien de alto rango en la base naval preguntando: “¿Dónde está la gente que no quiere ingerir alimentos? ¡Esto es una insurrección y la insurrección se paga con fusilamiento!”. D espués de to d a esa perorata, el tipo dice: “Un paso al frente todos los que mantengan la posición”. Yo di un paso al frente, incluso se colaron otros compañeros, y ahí nos aislaron, nos encerraron y nos amenazaron con las penas del infierno." (Extracto que acompaña a la ilustración en el libro).
Postal de difusión de Trazos de memoria: Ilustraciones animadas creadas a partir de los testimonios del archivo audiovisual de Londres 38, espacio de memorias.
"Yo no se lo dije hasta mucho tiempo depués, pero lo primero que pensé en ese minuto, es que habia vuelto mi papá. Pero ahí mi mamá me contó que el que había vuelto era el gato" (Extracto que acompaña a la ilustración en el libro).
Postal de difusión de Trazos de memoria: Ilustraciones animadas creadas a partir de los testimonios del archivo audiovisual de Londres 38, espacio de memorias.
"Me fuí donde ellos y escuché que habían estado buscándolos en el Tacna, en el Estadio Nacional y en otros lugares de detención. Así que volví y me metí a los camarines. Los soldados que estaban ahí se hicieron a un lado y me dejaron entrar y ahí vi gente que estaba muy, muy mal. Gente ensangrentada, tapada con frazadas; muy mal. Me di una vuelta como si nada y volví a salir." (Extracto que acompaña a la ilustración en el libro).
"El militar me abraza y empieza a caminar conmigo hacia la puerta, me dice "Mire, mire, mire mijo, vaya al Estadio Nacional y ahí hablé con él -me dio un grado y un apellido de alguien- y ahí debe estar su hermano". El pelao que estaba abrió la puerta y yo salgo a la calle, por la Alameda, por todas partes, todo el mundo me perseguía, yo estaba convencido de que casi me habían dejado salir para perseguirme. La verdad es que logré salir del Estadio Chile, con las patas y el buche y, a pesar del miedo, a partir de ese día entré en la clandestinidad." (Extracto que acompaña a la ilustración en el libro).
"Me fuí a presentar a la radio Nacional, tenía que tomar la conducción ya que yo encabezaba las tareas de comunicaciones. En cuanto llegué supe que nos habían volado la antena y que estábamos sin posibilidad de llegar al medio público. Teníamos nosotros un compromiso que era reproducir un discurso que grabó Miguel Enríquez en una cinta, ese discurso daba las instrucciones del MIR para el caso de un golpe" (Extracto que acompaña a la ilustración en el libro).