Sergio Peña Díaz, veterinario de 37 años. Es en su época universitaria como estudiante de Medicina Veterinaria ingresa a las filas del MIR, participa en la organización de pobladores y campesinos, asumiendo tareas de dirigencia.
Durante el gobierno de la Unidad Popular asume como ayudante técnico de la Sociedad de Comercio Agrícola de la ciudad de Valdivia, ascendiendo a jefe de la zona.
Tras el golpe de Estado es detenido y enviado a la cárcel de Valdivia, donde permanece hasta enero de 1974. Posteriormente parte a exilio en 1975 con destino a Dinamarca junto a su esposa y sus dos hijas.
Reingresa a Chile de forma clandestina a comienzos de 1983, siendo ejecutado por efectivos de la CNI en el montaje conocido como "Fuenteovejuna".